Opinopincha

LOS JUGADORES TAMBIÉN SIENTEN

En juego disputado la semana pasada por Copa Libertadores, Estudiantes derrotaba por la mínima diferencia a Libertad de Paraguay mientras corrían los minutos del segundo tiempo. El árbitro asistente cobró un penal que nunca existió, lo cual provocó los reclamos del equipo paraguayo.

Carlos Simón, el juez central brasilero, se apoyó del asistente y pitó el penal a favor del Pincha. Miguel Samudio, volante de Libertad, siguió protestando y el árbitro lo expulsó. El jugador se vio muy afectado y su reacción fue agacharse a soltar lágrimas. Pedro Sarabia, el capitán del equipo, tuvo que levantarlo para que abandonara el césped.

No es usual ver esto en un partido de fútbol, pues se han generado toda clase de prejuicios y de ideas como características que debe tener este deporte; por ejemplo, que es un juego de hombres, que hay permanente choque y que necesariamente hay un contrincante al cual hay que vencer, incluso sin importar muchas veces su integridad personal.

Cuando estaba viendo el partido, me pregunté cuál era el motivo por el cual lloraba Samudio. ¿Porque dejaba a su equipo con uno menos? ¿Porque consideraba injusta su expulsión? ¿Habría tenido dificultades durante la semana y fue en la cancha donde apareció su dolor? ¿Estaba triste por otra cosa ajena al partido?

Los jugadores también sienten: son personas como cualquiera y están en su derecho a expresar lo que les pasa…

Carlos Andrés Escobar

Psicólogo

simplementepalabras@hotmail.com